Fidelidad y Honor.

Juan A. Llopart para TdE/Fidelidad y Honor, hoy más que nunca

Una trampa. Un circo. Una larga espera. Un juicio largo. Una sentencia rápida. Y una jauría de cucarachas esparciendo la mierda que ha dejado el circo.

Esta sería la secuencia de un juicio contra unas personas que solo pretendían, a su manera, actuar de una forma distinta de como lo hace la actual sociedad. Querían actuar según unos Principios. Algunos pensaremos –o pensaran- que hay otras formas de hacerlo, pero quienes conocemos a estos camaradas –no sé si a todos- en mayor o menor medida sabemos como son, como piensan y cómo actúan. Sabemos que no son como los ha pintado la prensa, los patéticos verdes, (hay que acordarse de esas campañas de Bases Autónomas de: Más zonas verdes y menos verdes en la zona) ni los abogados de las acusaciones, ni el fiscal, ni los jueces. Siempre –así lo creo yo- se han comportado como personas con Valores ahora denostados, pero Valores limpios. Valores de honor, de camaradería, de lealtad, de entrega a la Comunidad.

Sí, ya sé que en casa de uno, u de otro, habría un folleto que decía esto o aquello, habría un cuchillo de montaña, un libro sobre Hitler y algún texto más histórico sobre el Tercer Reich. Pero lo cierto, es que a prácticamente a todos se les absuelve de todos los delitos que hasta la saciedad hemos oído que se les imputaba. En efecto, se les imputaba de unos delitos de los cuales se ha dictaminado su inocencia. INOCENTES. Ni tráfico de armas, ni apologías de genocidio, solo se les ha imputando asociación ilícita a quince de ellos.

Hace poco, muy poco, hemos escuchado una rueda de prensa de unos tergiversadores estalinistas, donde acusaban a uno de estos camaradas, zaragozanos para más señas, y entre ellos al delegado del MSR en Zaragoza, de traficar con armas, obviando el derecho constitucional de la presunción de inocencia. Hoy la justicia los ha exonerado de ello, son inocentes, no hay tal tráfico. Ahora nadie rectificará sus buenos nombres, la mierda esparcida por estos estúpidos ahí quedará.

Como era de esperar la farsa tenía que cebarse con alguien, necesitaban un culpable, alguien a quien señalar con el dedo, como el más malo de los malos, el circo debía de seguir su función. A Roberto le ha tocado el honor recibir la mayor recompensa que un disidente puede obtener de la falsa democrática. La no justicia necesita condenas en estos casos para justificar su actuación, para justificar su circo, siempre encontrarán algo a lo que puedan agarrarse para hacer ver que han actuado legalmente. Espero que recurra y que como mínimo, con el recurso, pueda quitarse ese año que le obligaría a pasar una temporada con las vacaciones pagadas a costa del Estado pero seguro que no tan bien atendido como lo son otros…

Yo los conocí –a casi todos- en un campamento de verano, donde practicaban deportes, participaban en charlas y escuchaban música alrededor de un cantante portugués. Algunos se acercaron al partido, venían a nuestros actos, y llegaron a estar afiliados unos pocos de ellos. Con el tiempo, alguno se quedó y otros se marcharon. Es difícil compaginar la rebeldía juvenil con el engranaje de un partido político y más difícil lo es, si ese partido tiene rasgos transversales. Aun así, nunca vi nada que fuera delictivo en ellos, siempre, como he dicho, vi a personas con Valores. Valores que yo también comparto.

Dicen en un basurero cibernético que el MSR ha dejado tirado a estos camaradas, saben bien, quien tiene que saberlo, que esto no ha sido así, la amistad y la camaradería, aunque se esté en distintas trincheras, es algo que nos diferencia de los falsos patriotas, de la masa, y de los políticos al uso. Ellos, los de la Demencia, que actúan como babosos y repugnantes guarros, haciando afirmaciones iguales a las que las plataformas antifascistas hacen, se habrían hecho pis y caca y se habrían tenido que colocar un enorme pañal de la dodotis Collection extra nada más conocer la noticia. Tal y como recuerdo que le ocurrió, en su día, a un emeserriano reconvertido ahora en angladista de pro, el cual nos pedía que disolviéramos el MSR por el circo montado por los verdes ¡como si el MSR hubiera tenido algo que ver en toda esta historia!

A mí me han enseñado a estar a las buenas y a las malas, y puedo decir con orgullo que, cuando el circo vino a mi casa y fui detenido, estos camaradas estuvieron allí, a mi lado, junto a la injusticia, no como otros, que escurrieron el bulto o como la Demencia que hizo quitar unos panfletos en apoyo a ENR en su Universidad de Verano del 2003. Por ello, en la medida que yo pueda, en la trinchera que esté cada uno, seguiré defendiendo su Honor y la Verdad, al margen de jueces, medios de comunicación, payasos nacionales o cucarachas variopintas. Hoy más que nunca:

Fidelidad y Honor.

¡LIBERTAD PRESOS PATRIOTAS!